Influencia afroamericana en los Oscar

Los premios de la Academia de las artes y ciencias cinematográficas más conocidos en el mundo, es uno de los espacios más concurridos por actores, actrices y todo el equipo encargado de dirigir, producir, escribir y hacer posible el montaje de las películas más destacadas en la industria del entretenimiento audiovisual.

¿Qué son los Óscar?

Los Oscar (sobrenombre designado por Walt Disney) es una forma de galardonar a las mejores producciones cinematográficas.

Esta academia fue propuesta en 1927 en los Ángeles, Estados Unidos. La organización buscaba destacar cuál había sido, entre los cientos de producciones que se realizaban cada año, el elenco de directores, actores, productores, técnicos y escritores más sobresalientes.

Estas ceremonias han aparecido en nuestras pantallas desde que tuvo lugar en el salón Blossom del Hotel Roosevelt en Hollywood en 1929 la primera de ellas, desde entonces se han entregado más de tres mil estatuillas y ha permanecido como una de las ceremonias más celebradas en Hollywood.

En 1935 se diseñó la estatuilla esculpida por George Stanley, que hoy tiene forma de caballero midiendo aproximadamente unos 13,5 centímetros de altura y 3,87 kilos recubiertos de oro.

Entre sus manos hay una espada cuyo significado es la integración de todos los actores, directores, técnicos, productores y directores cinematográficos, descansando en una base totalmente negra.

Estos premios tienen cerca de noventa años, aunque quedan muchas estatuillas aún por ser otorgadas.

Cambio notable en los Oscar

Durante años surgieron muchas críticas debido a la ausencia notable de nominaciones a personas de color, generando un malestar y una reivindicación por parte de todos los que pertenecen a esta industria y son afroamericanos.

La primera mujer negra en ganar un Óscar en el que la academia reconoció su extraordinario papel como “Mammy”, fue la talentosa Hattie Mcdaniel en el año 1940. Poitier, en 1963, fue el primer afroamericano en ganar un Óscar por la película: Los lirios del Valle.

Desde entonces las nominaciones se detuvieron, apareciendo actores y directores que han manifestado continuamente sus críticas ante esto. La academia aparentemente omitía las incesantes críticas a través de los medios, siendo un tema lleno de controversias.

Muchos denunciaban el por qué solo las personas de rasgos blancos eran las únicas nominadas y tenían el derecho a la estatuilla. Tras esta polémica muchos asociaban la ceremonia de la Academia de las artes y ciencias cinematográficas a un claro reflejo de sociedad racista.

La influencia de las personas negras en los Óscar se dio a través de algunos que decidieron alzar la voz a favor de las diversas razas.

Tal es el caso de Cheryl Boone Isaacs, presidenta de la academia de artes y ciencias cinematográficas en apoyo a una academia más diversa y amplia, que desde hacía más de tres años luchaba para la reivindicación social dentro de la corporación.

gala de premios vip oscar

No sin antes formar una consigna en el año 2016 “#Oscarsowhite” que se difundió de forma masiva a través de las redes durante el memorial del pastor, líder y activista afroamericano Martín Luther King, dado a que durante esos años la academia no había concretado la integración de personas de color en sus nominaciones.

La protesta mediática se propagó de manera inmediata a través de todos los medios de comunicación, alertando a la directiva de la academia.

Para el mismo año la corporación integró a más de dieciocho actores y actrices, entre ellos técnicos, guionistas, editores, productores de sonidos y un gran número de talentos desconocidos que tomaron lugar dentro de las nominaciones.

Las voces por fin fueron escuchadas por los medios, por lo que en su 89° aniversario la academia engalanó sus nominaciones con películas cuyo protagonista era una persona de color. Alguna de esas películas fueron: Moonlight, Hidden Figures, Fenses y Loving.

La politización de los galardones ha sido un tema recurrente y ha dado de qué hablar durante muchos años.

La reivindicación de los afrodescendientes es una lucha que ha ganado adeptos dentro de la academia, sin embargo, la lucha sigue por aquellos que aún no han sido integrados en este proceso.

Los latinos a su vez, también critican la ausencia de reconocimientos dentro de la academia por la escasez de nominados, considerando que existen muchos talentos que deben ser reconocidos por su trabajo, esfuerzo y dedicación dentro del ámbito del cine.

Reivindicación del talento y diversidad

Dentro de la industria no solo reivindican el talento de actores y actrices latinoamericanos, sino también la labor que realizan los diversos directores, escritores (guionistas), técnicos de imagen y sonido  y productores destacados.

A pesar de los galardones recibidos por algunas personas de color, estos no han sido muchos, podemos estar hablando de no más de quince. Por lo que los críticos y líderes activistas formulan la siguiente pregunta, ¿existe todavía racismo en la academia norteamericana?

En el siglo XXI solo nueve afrodescendientes de todos los nominados fueron galardonados con una estatuilla.

Está claro que no solo los de raza “blanca” y los de raza “negra” son los únicos que tienen talento, los hispanoamericanos también han tenido un importante peso en la industria cinematográfica, aunque no han tenido tanta relevancia, por lo que muchos lo atribuyen a la panorámica racial por la que ha estado sumergida la academia.